Buenas noches.
Mi consulta es porque vivo en una casa a planta baja y me he dado cuenta de que por debajo de mi baldosa para una línea de media tensión, de 30kv exactamente.
Tengo un medidor de radiaciones y la señal alcanza hasta tres metros de distancia por lo que llegaría hasta el interior de la casa.
Estamos viviendo aquí ya ocho años y recientemente mi hijo de cinco años ha sido diagnosticado de cáncer.
Quería saber si existe alguna relación de este tipo de radiación y el cáncer.
Si hay alguna ley donde exista una distancia mínima de las líneas de tensión a las viviendas.
Quería saber si es peligroso seguir viviendo aquí.
Gracias . Un saludo.
A partir de sus explicaciones, creemos entender que en las inmediaciones de su vivienda existe una línea eléctrica enterrada y que, utilizando algún sistema de medición, usted detecta en algún punto interior de la vivienda el campo electromagnético de 50 Hz emitido por los cables de la línea. Pregunta usted si la exposición residencial a esas emisiones es nociva y podría haber influido en el desarrollo del cáncer diagnosticado a su hijo, y si existe una ley que limite la distancia entre las líneas eléctricas y las viviendas.
A día de hoy, España carece de leyes que limiten la exposición del público a campos de muy baja frecuencia (incluyendo los 50 Hz de las líneas eléctricas). Por lo tanto, desde el punto de vista de la protección ante la exposición residencial a ese tipo de campos, no existen en España limitaciones legales en lo que respecta a la distancia entre las líneas y las viviendas.
Si ha tenido usted ocasión de leer nuestras respuestas a consultas similares a la suya, sabrá que la evidencia que relaciona la exposición residencial a campos de 50/60 Hz con el potencial desarrollo de cáncer se basa fundamentalmente en datos epidemiológicos sobre la incidencia de leucemia (no de otros tipos de cáncer) en niños (menores de 15 años) expuestos crónicamente a un valor promedio (en el tiempo y el espacio) de campo superior a los 0,3 µT (microteslas) en el interior de viviendas unifamiliares. Pero ese incremento de la incidencia es tan bajo como 3-5 casos añadidos anualmente por cada 100.000 niños expuestos en dichas condiciones. En el caso que usted plantea, no sabemos qué tipo de medidor se ha empleado, e ignoramos qué valores de campo magnético ha encontrado en su casa. Pero sabemos que los campos emitidos por los cables enterrados son exclusivamente magnéticos (los campos eléctricos quedan apantallados por el terreno), de muy corto alcance y, por lo general, se encuentran restringidos a las inmediaciones del trazado de la línea. Por lo tanto, aunque en algún punto interior de la vivienda se registrasen valores de campo del orden de los citados 0,3 µT, cabe suponer que el valor promedio de campo en el conjunto de las habitaciones estará muy por debajo de dicho nivel. Esto, sumado al débil incremento en la incidencia anual de leucemia infantil en las viviendas expuestas (3-5/100.000), indica que la probabilidad de que el cáncer diagnosticado a su hijo esté relacionado con las emisiones de esa línea eléctrica próxima a su vivienda es extremadamente baja.
Atentamente,
Grupo de Trabajo en Radiación No Ionizante, SEPR