He de hacerle un TAC a mi hija de 4 años porque el año pasado tuvo un episodio de neumonía con posterior atelectasia muy

El primer principio del Sistema de Protección Radiológica es la justificación basándose en la relación riesgo-beneficio, lo que quiere decir que el beneficio para su hija de la realización de esa prueba ha de superar el potencial riesgo al que se expone con la misma; así pues, su médico habrá considerado que esta exploración está justificada para poder diagnosticar su enfermedad o para descartar otras. Si le han solicitado esa prueba es que está plenamente justificada y, además, habrá que realizarla aplicando técnicas que minimicen la dosis a la vez que se consiga la información diagnóstica que se persigue.

Para reducir la dosis del TC los equipos de última tecnología utilizan sistemas de control automático de exposición y un método para generar las imágenes llamado reconstrucción iterativa. Estos equipos imparten la mitad de la dosis que los TC antiguos que no tienen esta posibilidad. Además, en su caso se deben utilizar protocolos adaptados a pediatría y prestar especial atención para reducir la dosis en lo posible centrando bien al paciente y reduciendo la zona de irradiación a la mínima posible compatible con la obtención de la información requerida.

En el hospital de Castellón seguro que hay TC con reconstrucción iterativa y unos profesionales que están muy concienciados en relación a la dosis que reciben los pacientes.

Desde hace muchos años se están controlando las dosis que reciben los pacientes en el ámbito médico y además la protección radiológica en los centros sanitarios está regulada por diferentes reales decretos de obligado cumplimiento desde antes de 1990. Los profesionales que se dedican a estos temas están bien formados y siempre buscan impartir la mínima dosis posible especialmente en el caso de los niños.

En general, el riesgo de efectos radioinducidos por exámenes de radiodiagnóstico, como es su caso, es muy bajo, y el beneficio de un buen diagnóstico supera en gran medida ese riesgo.  

Por todo ello, esto NO debería suponer un motivo de angustia para usted ya que seguramente las exploraciones estaban justificadas, se realizaron y se realizarán adecuadamente y los riesgos radiológicos a los que ha estado o estará sometida su hija son despreciables.