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Hola, buenas tardes Quisiera me ayudaran a saber cuánta radiación X he absorbido en un TAC de tórax y seis radiografías de tórax, todo ello realizado en dos meses y tres semanas. Por cierto, la última radiografía me la realizaron en el Sanatorio del Rosario (Madrid) por una persona de género femenino que me maltrató porque le pedí protección para los ovarios. En ese hospital, el aparato emana una dosis de radiación determinada en cada radiografía o la dosis la elige el técnico de rayos? Espero me ayuden a resolver estas consultas que me inquietan Muchas gracias

El primer principio del Sistema de Protección Radiológica es la justificación basándose  en la relación riesgo-beneficio, lo que quiere decir que el beneficio para usted de la realización de esas pruebas ha de superar el potencial riesgo al que se expone con las misma; así pues, su médico habrá considerado que estas exploraciones están justificadas para poder diagnosticar su enfermedad o para descartar otras.Si le han solicitado esa prueba es que está plenamente justificada y, además, habrá que realizarla aplicado técnicas que minimizan la dosis a la vez que se consiga la información diagnóstica que se persigue.

Para reducir la dosis del TC o en exploraciones simples los equipos utilizan sistemas de control automático de exposición y unos métodos para generar las imágenes que optimizan la calidad de éstas. Además, se utilizan protocolos adaptados al paciente y se presta especial atención para reducir la dosis en lo posible centrando bien al paciente y reduciendo la zona de irradiación a la mínima posible compatible con la obtención de la información requerida. Es decir, por lo general el sistema de RX controla la dosis que se imparte a cada paciente de manera automática y el técnico elige el protocolo, coloca al paciente en la posición adecuada, etc.

Desde hace muchos años se están controlando las dosis que reciben los pacientes en el ámbito médico y, además, la protección radiológica en los centros sanitarios está regulada por diferentes reales decretos de obligado cumplimiento desde antes de 1990. Los profesionales que se dedican a estos temas están bien formados y siempre buscan impartir la mínima dosis posible.

En su caso, el TC de tórax le habrá impartido unos 4 mSv (mili Sievert) y cada radiografía de tórax implica unos 0,02 mSv. Para estimar las dosis de manera más realista harían falta los datos técnicos de la realización de sus exploraciones.

En relación a la protección de ovarios, en el caso de exploraciones de tórax la protección no tiene sentido ya que la zona explorada está muy lejos de los ovarios, la dosis que les llega es despreciable y sería la propia radiación dispersa que llegaría a través del propio cuerpo siendo imposible la colocación de un blindaje efectivo.

Por otro lado, la utilización de este material en procedimientos que afectan a la región pélvicoabdominal exige extremar su colocación. Recientes estudios han demostrado la ineficacia de esta protección, debido a su mal posicionamiento, en un porcentaje muy alto de pacientes, sobre todo en el caso de las niñas, ya que no se puede determinar de forma exacta la posición de los ovarios. Además se puede originar una pérdida de información diagnóstica, o un incremento de dosis por la posible interacción del material de protección con el sistema de control automático de exposición del equipo. Sobre la base de lo anteriormente expuesto, se considera que, en la actualidad, durante la realización de exploraciones que afecten a la región pélvicoabdominal en niñas, no es recomendable la utilización de protectores gonadales, ya que su uso puede dificultar el correcto diagnóstico y no supone una aportación significativa en cuanto a la protección radiológica de la paciente.

En general, el riesgo de efectos radioinducidos por exámenes de radiodiagnóstico, como es su caso, es muy bajo, y el beneficio de un buen diagnóstico supera en gran medida ese riesgo.  

Por todo ello, esto NO debería suponer un motivo de angustia para usted ya que seguramente las exploraciones estaban justificadas, se realizaron adecuadamente y los riesgos radiológicos a los que ha estado sometida son despreciables.

Nota:

Toda radiación ionizante a la que hemos estado expuestos (como son los Rayos X) conlleva un riesgo de cáncer (ICRP 60; ICRP 103). No existe el riesgo 0 incluso con dosis bajas. La ICRP considera que incluso tras exposiciones a dosis bajas (se consideran "bajas" aquellas que son inferiores a 200 mSv) existe la probabilidad, aunque sea muy pequeña, de que tenga lugar un cáncer, considerándose que no existe una dosis umbral para su aparición. En este caso, cuando se habla de dosis inferiores a 100 mSv, se habla de riesgo despreciable. Todos estamos expuestos a la radiación natural, el fondo medio mundial es de 2,4 mili Sievert /año. Los seres humanos estamos sometidos a niveles de radiación entre 1,5 mili Sievert/año y 200 mili Sievert/año en función de la zona de la tierra donde vivamos. En las zonas de más dosis anual, la mortalidad y la esperanza de vida son normales y las pruebas citogénicas no muestran diferencias significativas.

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