Autores: N Stradling, A Hodgson, T Fell, E Ansoborlo, P Bérard, G Etherington and B Le Guen.
Este informe se interesa por la optimización de los procedimientos de vigilancia de las incorporaciones ocupacionales de los compuestos de plutonio presentes en la industria nuclear. Con este propósito se analiza la biocinética de estos compuestos en trabajadores combinando valores de parámetros de absorción de materiales específicos (derivados de datos humanos, animales o in vitro) con parámetros de deposición y transporte de partículas del modelo del tracto respiratorio humano de la Comisión Internacional de Protección Radiológica (ICRP) y el modelo sistemático de la ICRP para el plutonio. Se considera la inhalación repetida, uniforme y crónica del plutonio-239 como nitrato, dióxido, solo o en combinación con otros metales, combustibles mixtos (MOX) y plutonio 239 en presencia de otros actínidos y productos de fisión. Se enfatiza la posibilidad de evaluar dosis efectivas comprometidas por debajo de 20 y 6 mSv, dadas las restricciones para los trabajadores de categoría A y B impuestos por la legislación europea.
En orden a establecer el procedimiento de vigilancia más adecuado se discuten en detalle las ventajas y desventajas de las medidas externas de pulmón y los análisis de orina y heces. Se indica que en algunas organizaciones se evalúan las dosis con muestreadores personales de aire, pero este punto cae fuera del ámbito de este informe. Se concluye que la vigilancia de heces es el método más sensible y fiable para evaluar las dosis. Sin embargo para el nitrato del plutonio y óxido mixto de plutonio-239, que son moderadamente solubles en los pulmones, es preferible usar análisis de orina. Cuando el plutonio-239 se asocia con productos de activación y fisión las dosis pueden ser evaluadas con medidas de cobalto-60 o cesio-137 en cuerpo entero, orina o heces.
